Por David Blumberg , fundador y socio gerente de Blumberg Capital, una firma de capital de riesgo en etapa inicial que se asocia con empresarios para innovar y construir compañías tecnológicas exitosas.
Estamos viviendo un período de incertidumbre económica, comercial y personal debido a la pandemia de COVID-19. Ha causado recesiones y pérdidas económicas a escala monumental en todo el mundo. La ambigüedad en torno a la profundidad y duración de la desaceleración económica ha dificultado aún más la adaptación de las empresas.
En estos tiempos de volatilidad, es fundamental que los líderes empresariales mantengan la calma y esperen el futuro, en lugar de tomar decisiones precipitadas en el momento. Sin embargo, también es importante actuar con rapidez y ajustar las estrategias a corto plazo que permitirán a las empresas conservar los recursos necesarios.
Las pequeñas empresas deberán perseverar a través de una depresión temporal en la mayoría de los mercados. Esto varía según la geografía y el sector. Este es el momento de hacer todo lo posible para retener el flujo de caja y mantener las operaciones comerciales, los empleados, el desarrollo de productos y los planes para el crecimiento futuro. Construir una empresa exitosa e invertir son esfuerzos a largo plazo.
Aquí está mi consejo para los capitalistas de riesgo y las pequeñas empresas que navegan a través de este período de incertidumbre económica sin precedentes.
VCs: respira hondo y actúa con honor
Mi consejo para los inversores de capital de riesgo es respirar profundamente y mantener una visión a largo plazo. Recuerde, en particular, para el capital de riesgo inicial, estamos invirtiendo en el crecimiento constante y el potencial de una empresa a lo largo del tiempo, aproximadamente 10 años. Si bien las valoraciones probablemente disminuirán y sin duda habrá una necesidad de capital y apoyo adicionales, la economía eventualmente se recuperará.
Además, no tengas miedo de buscar nuevas oportunidades durante este tiempo. Nuevamente, aunque es probable que las nuevas empresas necesiten apoyo adicional, también es bien sabido que algunas de las mejores empresas respaldadas por empresas de riesgo se fundaron y financiaron en tiempos de recesión. Los ejemplos incluyen Facebook, Microsoft, Nutanix y Electronic Arts.
Recuerde que los empresarios, compañeros inversores y vendedores tendrán recuerdos a largo plazo. No juegues demasiado tu mano. Si bien puede ver la oportunidad de extraer términos inauditos, piense dos veces y piense como si las cosas hubieran cambiado. Le conviene asociarse donde la relación sea justa y equilibrada.
Startups: enfoque en I + D, personas
Para los empresarios con recursos suficientes para sobrevivir de 3 a 12 meses de ventas nuevas mínimas, esto debería verse como un momento para cambiar el enfoque para desarrollar un mejor producto, mejorar la automatización de los procesos internos y mantener a los clientes existentes bien atendidos. Esto no solo fortalecerá el negocio en general, sino que también lo colocará en una mejor posición para responder a la demanda acumulada y reanudar la competencia una vez que regrese el crecimiento económico.
Dicho esto, sin duda es un momento muy confuso para empleados y gerentes por igual.
Estos son algunos pasos para ayudar a garantizar el bienestar del personal y de la empresa en su conjunto:
Sea empático.
Póngase en contacto con empleados, colegas e inversores a nivel personal. En estas circunstancias inusuales, las personas trabajan mejor con procesos estructurados, rutinas familiares y cuando realmente se sienten conectados, escuchados, vistos y apoyados.
Al hacerlo, participar activamente y utilizar herramientas de “empresa social” para un entorno de trabajo desde el hogar que puede durar meses.
Piensa a largo plazo.
Intenta actuar racionalmente, no emocionalmente. Base sus acciones en un conjunto claro de suposiciones, incluida la planificación de contingencias, que todos entiendan. Mantenga la vista en la visión a largo plazo para el crecimiento y la escala, pero tome las medidas defensivas y de estabilización adecuadas a corto plazo. Además, recuerde que también hay oportunidades para contratar a mejores personas, hacer más capacitación y realizar adquisiciones, así como otras tácticas de “inclinación hacia adelante”. Considere ajustar los indicadores clave de desempeño y las evaluaciones con flexibilidad, mientras mantiene medidas rigurosas y eficiencia para avanzar.
Presupuesta y usa los recursos financieros estratégicamente.
Revise su presupuesto y concéntrese en el flujo de efectivo con alternativas de planificación de escenarios. Luego, reasigne el presupuesto a las principales prioridades y difiera o cierre proyectos e iniciativas de menor prioridad.
Luego, busque formas creativas de reducir costos reduciendo temporalmente los salarios (comenzando con los suyos), diferiendo los salarios o, en algunos casos, intercambiando el salario por opciones de capital. Para esto, consulte siempre con los equipos legales y de recursos humanos.
Por último, evalúe la situación crediticia con los prestamistas y retire el crédito disponible antes de que sea necesario. Y, cuando sea apropiado, aproveche el efectivo proveniente de programas federales y estatales, como los préstamos de la Ley CARES de la Administración de Pequeños Negocios.
Si bien nunca es fácil pivotar rápidamente debido a circunstancias imprevistas, ahora es el momento para que los CEO de pequeñas empresas demuestren ser líderes visionarios, prudentes y confiables para salir de esto aún más fuertes.
El camino a seguir
Maniobrar a través de este momento histórico y desafiante requiere adoptar la mentalidad correcta. Si bien es difícil continuar con los negocios como de costumbre, es importante tener en cuenta que hay una luz al final del túnel y que las acciones que se tomen ahora afectarán el éxito futuro.
A largo plazo, los comportamientos exhibidos, los recursos desplegados, las lecciones aprendidas y los nuevos protocolos implementados pueden permitir una mejora significativa en el cambio de pasos y conducir a un futuro mejor para empresarios, empleados, inversores y sus clientes.
Ilustración: Dom Guzman